04 Apr
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Las humanidades están de moda, pero, desgraciadamente, no por su valor social —insustituible y necesario—sino por su ostracismo. Las políticas depredadoras que desde hace décadas la constriñen, agotan y menosprecian han escrito un nuevo episodio en esta ya dilatada historia de acoso con la eliminación de la asignatura de Ética de la enseñanza obligatoria. 

Nada hemos aprendido de las últimas tres grandes crisis de la humanidad. La perdida de la brújula moral del sector financiero y otros ámbitos —dijo el premio Nóbel de economía Joseph Stiglitz— fue la causante de la crisis de las subprimer, la mayor crisis económica que ha conocido la historia. La discriminación por edad —etaísmo— y la falta de compasión hacia los grupos y las sociedades más vulnerables asolaron nuestras conciencias durante los peores momentos de la crisis pandémica de la COVID-19. Y el auge de los nuevos populismos y las democracias han generado una de las mayores emergencias humanitarias y democráticas en Europa desde el fin de la Segunda Guerra Mundial por la crisis bélica de la guerra de Ucrania. La respuesta política a estas crisis, es el arrinconamiento gradual de la filosofía en la educación secundaria. 

Frente al cuestionamiento al que se ve actualmente sometida la disciplina de la filosofía, los próximos días 7, 8 y 9 de abril, la Universitat Jaume I acogerá el XXIV Congreso Valenciano de Filosofía, una cita organizada por la Sociedad de Filosofía del País Valencià, con el fin de reivindicar su valor. 

Durante tres días, la Facultad de Ciencias Humanas y Sociales de la UJI será el lugar en el que se presentarán 64 ponencias con los actuales avances en el ámbito de la filosofía y de las humanidades. Bajo la nueva presidencia de Domingo García Marzá, catedrático de ética de la Universitat Jaume I, el congreso continuará con la labor que la Societat de Filosofia del País Valencià viene desarrollando desde que se constituyó en los años 80: impulsar la filosofía y su didáctica.

Este objetivo se mostrará ya en la conferencia inaugural, donde la profesora Adela Cortina, catedrática de ética y doctora honoris causa por la Universitat Jaume I, intervendrá con la conferencia titulada “El futuro de las humanidades en la era digital”. El congreso contará con otras cuatro conferencias. Tres de ellas serán a cargo de la profesora Anna Estany, Antonio Notario, Elena Nájera y la última del profesor y catedrático de filosofía Tobies Grimaltos, anterior presidente de la Societat de Filosofia del País Valencià, quien intervendrá con la conferencia titulada “Caracterización y defensa de un escepticismo razonable”.

A pesar de la afrenta política hacia la filosofía, el futuro de las humanidades se muestra cada vez más halagüeño y atractivo. Si la sociedad civil valora sus contenidos por su enorme e insustituible contribución a la emergencia de un mundo más fructífero, justo y felicitante para todas las partes en relación, las diferentes esferas de actividad reclaman cada vez más profesionales con competencias en filosofía para orientar, innovar y desarrollar su actividad en una forma humanamente aceptable.<br>Al respecto, cabe destacar el interés de los nuevos planes de estudio de grados universitarios por la inclusión de contenidos filosóficos, como, por ejemplo, Ética de la inteligencia robótica, Ética del turismo, Filosofía de la ciencia y las nuevas tecnologías o Pensamiento feminista en la Universitat Jaume I, así como la demanda actual del mercado de profesionales cualificados en filosofía para cubrir las necesidades vinculadas con el diseño, aplicación y uso de herramientas de Inteligencia Artificial y analítica big data, con la mediación y resolución de conflictos en la empresa, con la gestión ética y la RSC a través de códigos éticos que integren la figura del ethics officer, con los retos que presenta el turismo; con el diseño y la aplicación de planes de igualdad o con la crítica democrática en medios de comunicación, entre otras muchas cosas.



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